Si no nos concientizamos en lo fundamental que es colaborar en el mantenimiento de nuestro entorno marino, no somos realmente pescadores deportivos
El mar es una de las maravillas que existen en este planeta. Navegar en sus aguas, ver sus atardeceres y observar su rica flora y fauna, enriquecen el alma de quienes podemos disfrutarlo. Si a esto añadimos las emociones que nos regala la pesca deportiva tenemos una combinación única.
Es un idea aceptada que el mar no es un amigo del que debamos abusar y del que debemos alejarnos en sus momentos de ira. Nunca debemos perderle el respeto si lo hacemos nos puede costar la vida.
Los expertos han alertado sobre el agotamiento de sus recursos, por lo que debemos velar por ellos si queremos que las futuras generaciones lo conozcan y disfruten como lo hemos hecho nosotros. Resulta desagradable navegar hacia la marca de pesca y cruzarse por el camino con infinidad de bolsas, plásticos, y basura de toda índole. Peor aún es ver a algunos de los que gustan llamarse ¨pescadores deportivos¨ arrojar al mar todos sus desperdicios y verles pescar crías de grandes peces.
Si no nos concientizamos en lo fundamental que es colaborar en el mantenimiento de nuestro entorno marino, no somos realmente pescadores deportivos, si no simples exterminadores por que un depredador cuida su entorno. Cuidemos el mar, velemos por sus especies y transmitamos esta conciencia a nuestros hijos para que a su vez ellos y sus descencientes puedan seguir disfrutando de una de las maravillas del universo "EL MAR" y de nuestro apasionante deporte "LA PESCA DEPORTIVA".
Algunas reglas de pesca en barco:
1-Nunca deje de respetar el mar.
2-Respete la legislación y las normas existente. Tallas, pesos, vedas, protecciones, etc. Incluso si considera que con la legislación no es suficiente, haga caso a su conciencia. Un pescador sabe mejor que nadie qué pez es inmaduro aunque tenga la talla permitida, así como cual especie escasea y debemos liberar para que prolifere, y qué medidas debe tomar para no perturbar el medio marino, etc. Nosotros somos los amantes del mar y tenemos la responsabilidad de cuidar de él.
3-No arroje desperdicios de ninguna clase al mar.
4-Recoja los plásticos a la deriva, no solo por el factor ecológico, también podremos evitar averías en nuestros motores. A quién no le ha pasado al trolear que la pala de timón empieza a sonar y la desilusión nos mata al comprobar que de nuevo hemos enganchado un plástico.
5-No arrojar anzuelos dañados, que no nos sirven o ya no nos gustan por que pueden picar peces y morir por nuestra negligencia.
6-No arroje gasolina, aceite o detergentes no biodegradables al mar. Los barcos pueden estar muy limpios y a punto, pero para que los queremos si luego vamos a navegar por basureros.
7-No arroje al mar las marañas de hilos que se nos han enredado.
8-En ocasiones capturamos especímenes que no vamos a saber aprovechar o que consideramos que por su belleza, por nuestro ánimo o por la razón que sea, debemos poner en libertad.
Fuente: Buenapescashop
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