Sin ningún ideal ortodoxo, trataré de resumir sobre todo como apoyo a los que comienzan en este quehacer, algunos datos (léase: ALGUNOS... ) sobre la antigua y cada vez más adictiva PESCA DE PLAYA.
De hecho los apellidos (surfcasting o surfishing) vamos a dejarlos aparte para los que les gusta el sentido exacto de los hechos y vamos a procurar adelantar en lo que nos gustaría saber de manera general, antes de salir a encontrarnos con el mar y nos hablaran de qué tener en cuenta, equipos, tips, y como disfrutar sin importar la edad ni sexo, de esta maravillosa manera de asumir este deporte...
que además se comparte en uno de los escenarios más llamativos de cualquier tip de pesca, donde muchas veces el pescador en franco diálogo con su solitaria soledad, se enfrenta a la madre natura en toda su inmensidad desde el espacio que ocupa su cuerpo, su caña y su mente.
Para disfrutar de este tipo de pesca no es obligatorio un equipo especializado y sí lo tendrá que ser, en la medida en que nos vayamos especializando en ello.
De igual manera puede ser un equipo de casting o de spinning ( que soporte el agua salada) y cañas que pueden comenzar desde los 6 piés hasta 13 o 15 según dispongamos. Hay quien asegura que el casting es mejor que el spinning por lograr mayores distancias, otros que el spinning es más cómodo pero lo real es que en breve tiempo sabremos cual se adecua más según nuestros escenarios y hábitos, y decidiremos entonces a cual echarle el ojo y los dineros.
En esto de los juguetes de playa, siempre será imperante un libraje de entre 14-20 (hay quien lo hace con 8 ó 10 lbs, y/o con 30 y 40 lbs…pero no es la media) y una capacidad mínima de 150-200 ydas en el carrete, para evitar sustos aunque lo mejor es más de 250 según sean las expectativas y después de saber a qué estamos expuestos en ese escenario.
De los precios y prestaciones ya hay bastante escrito, y es bueno recalcar que hay para todos los gustos y colores (y bolsillos) y la efectividad de nuestro equipo siempre será premiado por lo certero que podamos ser, a la hora de seleccionar qué equipo necesitamos, sobre todo teniendo en cuenta qué señuelos vamos a usar, para dejarlos caer en cuál distancia, para tratar de sacar qué especie.
Una tabla promedio y muy genérica que pudiera tenerse en cuenta para armar un equipo para playa es la siguiente:
De las cañas y como en todo: hay marcas y modelos (y precios).
De una pza., de dos y de tres y hasta telescópicas, de muy poco uso acá, pero que sin embargo en el mercado Europeo mantienen su hegemonía a la par de las mejores. No es nuevo que desde hace unos meses algunos colegas en diversas partes de México hayamos asumido el uso de cañas “salmoneras” buscando más alcance con señuelos pequeños y más diversión con capturas medianas, que nos ha resultado de maravillas, y para sorpresa nuestra también ha resultado a la hora de batallar animales de más de 6-8 kilos, por lo que se ha convertido en un aliciente para los que nos gusta esta pesca y no tenemos los animales y los escenarios ideales como en Manzanillo y otros bellos lugares del país.
¿Por qué se usan en la pesca de playa las cañas largas?
Lo primero es el alcance, pues la parábola que describe el señuelo en el lance permite que este se eleve ganando distancias y descendiendo mucho más lejos que con una vara MÁS pequeña, porque lo cierto es que no podemos lanzar los señuelos de manera horizontal logrando las distancias que queremos, y menos en este tipo de pesca que muchas veces se usan o señuelos o plomos de mayor peso, y de no subir el arreglo lo posible, éste caería prácticamente a nuestros pies si no aprovechamos los principios físicos del movimiento descripto, y en la media de la mayoría de las playas a más profundidad siempre habrán mayores presas, por lo que la regla en general es tratar de buscar la mayor distancia.
Lo segundo es que cuando se atrapa a un buen ejemplar con cañas largas , estas juegan su papel a la hora de ofrecer resistencia y poder, no es igual para el animal que está en la punta de la linea doblegar una vara de 12 pies que una de 6 con sus características cada una, ofreciendo una resistencia que sustituye en mucho el esfuerzo del pescador con la espalda, esa ventaja se logra ver mejor con las cañas salmoneras, donde cada parte de la caña hace su trabajo controlando toda la acción con un leve movimiento de muñeca apoyándose con el antebrazo, mientras el pescador mantiene una postura sin esfuerzos.
También hay quien tiene el privilegio de lugares muy apropiados para este tipo de pesca donde se mantiene un oleaje promedio que ya ha
identificado las zonas de mayor actividad, y le es necesario llegar a esas zonas, casi siempre y detrás de las primeras olas.
Si pescamos con carnada y sostenemos la caña en su rod holder (tubo enterrado de pvc en la arena para sostenerla) o en las manos, no es igual tratar de sostener la línea elevada desde una altura pequeña o desde una buena altura, ello incidirá a, cómo estará posicionada la
carnada en el fondo y de seguro influirá en la cantidad de piques que tengamos.
Cuando usamos estas varas (de más de 8-9 pies) también el momento de soltar la línea varía en algo ya que debe hacerse un poco antes de
que pase por encima de nuestro hombro en la zona de esfuerzo del lance, cuando comienza este (A) se incrementará la fuerza a medida que
avanza y terminar en B y deberíamos soltar la línea desde aprox. sobre la línea quebrada, para buscar la altura y distancia posible. Como he
dicho otras veces un buen lance determinará en mucho lo rápido o tardío del cansancio por este esfuerzo, he lanzado (por conocer) hasta con
16 pies de vara y es impresionante el movimiento que se devuelve por inercia, cuando hacemos un lance de considerable esfuerzo, que no es
del todo bien ejecutado.
En este tipo de lance se tiene la idea de que si tenemos una vara de 12 pies, esa sería el alto de nuestra parábola aproximadamente (C), partiendo de donde pivotea el movimiento (o sea por encima de la cintura) sin embargo nadie tiene en cuenta que es mucha más que ello, pues no suman la línea o leaders que sale de la vara con el señuelo, que debe ser aprox, de 1/3 del largo de la caña, por lo que tendremos con una vara de 12 pies, una parábola de 12+4=16 pies de alto o largo, (D) partiendo de la cintura del pescador.
Debemos estar consientes, si es nuestro interés, de todo lo que podemos aportar para ganar distancias, como el uso de carretes de bovina ancha, línea del menos grosor posible etc etc y podemos sumarle a ello, tratar de bajar la caña en lo posible al final del lance, no hay el mismo roce ni presión en ello en 1 que en 2, sobre todo cuando pasa la línea por el tip (puntera).
De igual manera los nudos de líderes, empates etc, deben quedar fuera de la caña o si están dentro de las guías, lo más lejos posible de la punta, ya que esta parte, por ser la de menor abertura es la que más contacto hace con la línea y por supuesto si tienen varios puntos de choque entre vara y línea, ello le restará fuerzas a la velocidad de salida y por ende a la distancia final por alcanzar.
En las primeras guías esto no es frecuente ya que casi siempre son más anchas que lo normal (en las varas de spinning) precisamente para
evitar el roce con la línea en lo posible.
No hay dudas que es muy cansado estar casteando con varas de más de 9-10 pies de manera continua, y sobre todo si no tenemos balanceado el peso entre la caña y el carrete y no tenemos determinado de manera correcta el poder que nos hace falta para el tipo de pesca que vayamos a usar la vara, ello se describe por la parte de la caña que se doble a la hora del lance y que hará que el señuelo avance más-menos según esa nomenclatura como se expone en el esquema. Una buena vara de poder MH sería la media para lanzar lures y carnada, hay quien prefiera las M para carnada por tener una punta más suave y por tanto más sensible a cualquier movimiento, y hay quienes prefieran una buena H cuando se trata de mover señuelos con precisión como bucktails o plumas, tener que hacer menos esfuerzo en el momento de la clavada, ello insisto, dependerá de cada cual en gustos y preferencias, porque en realidad no hay ley posible en ello.
De igual forma y de manera básica podremos saber si el equipo que tenemos está balanceado en cuanto a sus pesos, y que estos estén repartidos para proporcionar un movimiento parejo, y es colocando el dedo índice o en un eje horizontal la caña con el carrete, siempre en el punto vertical en la caña, donde termina el carrete (ver puntos rojos en esquema) y cuando se coloque la caña sobre ese punto, esta debe quedar lo
más horizontal posible. Hay muchas cañas de marca, que venden además unos contrapesos que se introducen en los mangos para solucionar
este problema.
En el caso de la pesca playera con equipo medio varas de 6,6-7 pies y señuelo o carnada, el equipo se comportaría idéntico que si pescáramos en ambientes interiores, tanto con carnada o señuelos, con la diferencia de los materiales necesarios para el salitre, y los cuidados extremos
que debemos tener para ello una vez terminemos nuestra jornada, y por supuesto las características de los arreglos y señuelos que trataremos más adelante.
Por Rolando Cordoba
Leer más: http://pescadeplayayucatan.webnode.es/la-pesca-de-playa/
