Go Fish

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jueves, 3 de septiembre de 2015

Cañas de Pescar


Por: Rolando Córdoba
El nombre de cañas se debe a las primeras varas fabricadas con cañas de bambú y su desarrollo constante ha devenido en una herramienta que puede volverse verdaderamente muy eficiente, sobre todo cuando conocemos para qué fue diseñada y qué uso darle. Lo primero es saber identificar si una caña nos sirve para carretes de spinning o para convencionales.

Tomando la caña y girándola para que la marca quede en la parte superior, si la marca queda alineada con el asiento del carrete y las guías: arriba, es una caña para carretes de bait casting o troleo (carretes de bobina giratoria) y por lo general están armadas con guías de dos patas. Si por el contrario, colocando la marca arriba, el asiento del carrete y las guías (que siempre están en la misma línea) quedan debajo, es una caña para carretes de spinning o de bobina fija , armadas en su gran mayoría con guías de una sola pata.

El nombre y los apellidos pudieran ser las denominaciones para poder diferenciarlas y saber cómo y para qué deben usarse. Sus funciones básicas son tres: poder lanzar a más distancia, facilitar la maniobra con losseñuelos en caso que se requiera de movimientos determinados y por supuesto, aportar la resistencia necesaria para pelear el pez. Cada marca ofrece la información de manera distinta, pero la mayoría incluye datos como el largo, el poder, la acción, el peso de los señuelos, y la línea a usar;  y conocer ello es evitar los errores que muchas veces hacen que se escape una captura, o en el peor de los casos se quiebre la caña y/o la línea, y hasta se dañe el carrete.

El modelo es la identificación particular que le impone cada marca a su producto donde en algunos casos se suma una codificación para el blank, la acción y hasta un posible número al final para indicar que es una caña de más de 1 pieza.

La acción de las cañas determina la velocidad con que vuelve a su posición original después de flexionarse por una fuerza externa, ya sea durante el casteo o la pelea con el pez. Esta acción está determinada por el proceso de construcción y el material del blank, del que hablaremos más adelante.

Esta ACCIÓN por lo general se divide en tres categorías:

Slow o lentas, son las cañas que se doblan como arco a todo su largo, resultan muy efectivas para pesca con carnada, y lanzar grandes pesos. Se requiere de más esfuerzo para clavar y no son las mejores para trabajar artificiales que requieran de un movimiento preciso.

Medium o moderada, son las que se doblan desde algo más que la mitad hasta los 2/3 superiores según cada fabricante. Generalmente son las que más se usan para casi todos los tipos de pesca y propocian un hook set más efectivo que las cañas lentas, resultando apropiadas para casteos más largos y una buena opción para la pesca con carnada y cañas largas, lo que popularmente se conoce como surf casting.

Fast, también denominadas cañas rápidas. Este tipo de caña se dobla más en la parte superior, generalmente desde el final del  último tercio o cuarto del largo total y son las más usadas para la pesca de spinning con señuelos, se caracterizan por hook set (clavados) muy efectivos.

El poder de una caña de pescar está en su resistencia para doblarse cuando se le impone una fuerza externa. Por lo general esta nominación ayuda para seleccionar la línea y el peso de los señuelos que podemos usar, y hasta el tipo de pesca o especie que nos vamos a encontrar.

Un dato importante es que aunque exista mucha similitud no hay normas estrictas establecidas entre las marcas para que cada modelo responda exactamente como una similar de una marca diferente. Ello es un factor que solo podemos conocer desde el momento que ponemos la caña a prueba con los pesos y el trabajo que cada pescador tiene como norma o costumbre, dependiendo de los señuelos que use, los movimientos que acostumbra a imponer a la caña, su reacción a la hora del pique, la forma de pelear cada especie más una larga lista de etcéteras, que conforman los hábitos de cualquier pescador.

Sin llegar a establecer reglas podemos decir que hay cañas para cada escenario, cada peso de señuelos y “casi” para cada especie, solo se trata de detenernos para hacer una selección lo más acorde posible o de lo contrario hacernos de un equipo bien versátil que cubra la mayoría de nuestras necesidades.

Peso de los señuelos (lure) y el libraje de la línea (line)

Cuando leemos: LURE: 1/4 -5/8 oz. el fabricante nos está diciendo que si trabajamos con señuelos de entre esos pesos: el trabajo de la caña será todo lo eficiente posible según los parámetros para lo que fue diseñada y construida. Ello no quiere decir que no podemos lanzar -por ejemplo, señuelos de 1/8 de oz, claro que se puede, pero la distancia durante el casteo no será la misma ya que la caña no “carga” la suficiente fuerza por el peso insuficiente del artificial, obligándonos a un mayor esfuerzo para alcanzar las distancias que lograríamos si lanzáramos el peso adecuado. De igual forma si sobrepasamos el peso, debemos tener en cuenta que estamos poniendo en juego la integridad de la caña que no se fabricó para soportar ese esfuerzo; si por alguna razón esto fuera necesario se recomiendan lances menos enérgicos, con menos fuerza.

En cuanto a la línea sucede algo similar, la caña trae impreso los librajes mínimo y máximo conque debemos armar nuestra caña, por ejemplo: Line: 12-20 lbs. Por lo general siempre trato de usar la línea promedio y me ha funcionado muy bien, lo que en este caso se pudiera leer como 15 lbs (12+20=32, entre 2 =16 lbs, y acercándome a los pesos más establecidos por la mayoría de  las marcas, sería el de una línea de 15 libras).

¿Se puede usar una línea de 10 libras en una caña que marque 20-30 lbs? Sí, si tenemos mucho cuidado en no poner a pelear la línea que traemos contra la fuerza de la caña que fue diseñada para soportar un castigo más fuerte, por consiguiente es probable que si no conocemos del manejo correcto del drag (freno) o la posición de la caña durante la pelea podremos quebrar la línea. Si por el contrario usamos una línea de por ejemplo 30 libras, en una caña que marca 6-10 lbs (promedio 8 lbs.), es probable que sin un manejo adecuado, la que se quiebre sea la caña; que no fue diseñada para la fuerza que la línea puede soportar; lo que nos dice que nada mejor que trabajar con los pesos de lure y línea que recomienda el fabricante.

Para los ambientes que acostumbramos como orillas de playas, bocanas y esteros, las cañas más usadas son las de poder M o MH de entre 6 y 7 pies de largo para líneas entre 10 y 15 libras, que nos van a garantizar un buen encuentro con los depredadores que merodean la orilla, sea la especie que sea.

¿Cuáles son las partes principales de una caña de pescar?

Lo primero es el blank. Así se nombra al tubo en forma de aguja cónica que forma la vara sin ningún accesorio, o sea sin guías, sin mango, sin el asiento del carrete etc. Es la base donde se irán colocando cada una de estas partes para armar la caña  según su uso y denominación. No importa si vamos a pescar en agua dulce o salada: el blank es el mismo, lo que diferencia una caña para un ambiente y otro son sus componentes, o sea, que tan resistentes son a la corrosión. El blank es el corazón de la vara. Por ello y lo desconocido del tema me voy a permitir aunque de forma básica, extenderme un poco más en este punto.

El blank puede fabricarse de varios materiales; los más usados son el carbono (delgados hilos de grafito que con diversos pegamentos y con ayuda de calor, se van uniendo para formar una película muy resistente) y la fibra de vidrio, que es muy flexible, aunque más pesado y menos sensible. Por lo general las cañas de fibras de vidrio son más económicas y resisten muchos maltratos, siendo una buena opción para los que comienzan en esta actividad.

¿Cómo se fabrica un blank?

El blank por lo general se forma enrollando una película que se va uniendo por medio de calor y pegamentos muy específicos, alrededor de un tubo metálico que se extrae más tarde, conocido como: mandril. Este proceso se aprovecha para crear en cañas de altas prestaciones lo que se conoce como espina de la caña; que no es más que propiciar que uno de los lados quede con más grosor desde una punta a la otra, doblando y haciendo coincidir sus extremos y/o intercalando pequeñas láminas del mismo material entre las capas, para lograr que una parte del diámetro quede más gruesa que la otra. Es sabido que cada marca guarda con mucho recelo los materiales que usa, pegamentos, formas de aplicarlos y los procesos de acabados para garantizar un  desempeño único a sus modelos top of line.

Los fabricantes de líneas económicas nunca tienen en cuenta en la fabricación el uso de la espina de las caña, otros ni lo conocen. Pero mientras más cara sea una vara, de seguro más empeño y dedicación se tienen en cuenta para la elaboración del blank con una o varias espinas según cuán sofisticado sea el diseño para buscar la mayor eficiencia de cada modelo.

¿Favorece tener en cuenta la espina de las cañas?

Como comentamos, para los que compran o venden cañas económicas no es un dato importante porque de igual manera, pudo haberse tenido en cuenta o no a la hora del armado por el fabricante, peeeero... para los armadores reconocidos y las marcas con modelos top of line del mercado, el conocer de ello y aprovechar sus ventajas puede significar mucho en el desempeño de sus productos, que -además- de seguro se armarán con los mejores componentes para marcar una gran diferencia con el resto de las cañas.

Aunque son muchos los factores que favorecen tener en cuenta la(s) espina(s) al armar una caña, la base de ello es que siempre habrá más resistencia del lado de la caña donde se ubica la espina.

A modo de resumen me permito citar lo que el experimentado armador de cañas Héctor Yamasaki dejó expuesto en un excelente artículo donde cita algunas de las ventajas y desventajas al colocar las guías: sobre o enfrente de la espina de la caña.

“Y si las guías no estuvieran  sobre la espina o en el lado opuesto -continúa el mismo Héctor, en términos generales: no pasa nada.”

“De hecho la mayoría de los pescadores, (y muchísimos vendedores y ensambladores de equipo) desconocen la existencia de la espina y sus efectos, y pueden sobrevivir sin tener en cuenta este pequeño detalle. Ahora, una caña montada sobre un blank de primera, se convierte en una caña de segunda si no se toman en cuenta este y otros aspectos”.

Las guías de las cañas -sin detenernos en todas las opciones- se componen por lo general de una base circular de metal (anilla) , donde se insertan las guías de diversos materiales como cerámica, óxido de aluminio, cromo; el óxido de titanio, el SIC (silicón carbide) etc, por donde pasa la línea.  Estos aros metálicos que sujetan las guías se unen a la caña con lo que se conoce como patas de la guía, que son las extensiones o pies que se usan para sujetar las guías a la caña en puntos determinados y que deben alinearse (si la caña es de más de 1 pieza) con mucho cuidado por el pescador a ojo, antes de ponerla a trabajar.

Cada día se ofrecen mejores soluciones para las guías, siendo dos de ellas por su diseño las más populares: las de una sola pata, usadas por ejemplo para spinning y fly y las de 2 patas, que por lo general se usan en carretes de bait casting, troleo etc. En ello cabe destacar que las guías de 2 patas crean un espacio muerto  en la caña por los propios “pies” cuando se fijan a la caña imposibilitando que se doble en ese segmento dándole más rigidez a la vara en los puntos donde éstas están situadas; mientras las guías de 1 sola pata, hace que la caña pueda arquearse sin esas zonas rígidas haciéndolas por lo general más flexibles y propicias para lograr un arco más uniforme.

Las principales guías de una caña –de la especialidad que sea- siempre serán: el tip top o puntera que juega un papel importante a la hora de direccionar el lance y la primera guía, la que queda más cerca del carrete. Por lo general esta puntera o tip top, es la guía que más sufre por ser la guía donde la línea se apoya para cambiar su dirección y encontrarse con el pez. Por lo mismo es la guía que soporta el mayor roce a la hora del recobro, y peor aún cuando se arman los arreglos con nudos mal hechos trayendo como consecuencia muchas veces que se salga la guía que la sostiene dentro de la anilla.

La primera guía en muchos casos (según la modalidad)  es de mayor diámetro por ser la encargada de recibir la línea que sale del carrete (en forma de espiral en los carretes de spinning), y guiarla para que siga su recorrido hasta salir por el tip o puntera de la caña.

Mientras más guías tenga una caña, habrá más puntos donde repartir la resistencia que el blank ofrece a la hora de una buena pelea y por supuesto será más eficiente el trabajo de la caña, posibilitando capturas de mayor tamaño con menos esfuerzo del equipo en su totalidad.

La tendencia general (sobre todo para los más nuevos) siempre será de asegurar la captura sobredimensionando la fuerza y el poder de la caña, sin tener en cuenta cuánto de resistencia aporta una buena caña y claro: el balance o la buena intercacción de todo el hardware o cojunto. Me llama la atención que cada vez que se sucede una captura significativa, que se exponen batallas verdaderamente épicas con buenas piezas, la mayoría siempre tiende a preguntar lo mismo.Todos peguntan por el señuelo como si éste, además de lograr atraer al depredador y mantenerlo clavado, fuera el único responsable de soportar la pelea o cansar al pez para finalizar la captura...

¿Cañas de 1 o 2 piezas?

Se dice que se rompen más las cañas de una sola pieza... Lo cierto es que son más los accidentes con cañas “enteras” por pisarlas accidentalmente en el piso, por las aspas de un ventilador de techo o una puerta de un coche que es cerrada por la brisa…pero ¿ello es como para tenerlo en cuenta? Al parecer sobre todo para los pescadores de agua dulce: no, pues muchos aseguran que no hay nada mejor que una buena caña “enteriza”, para saber cuando la lobina ataca el señuelo y lo mantiene en la boca sin moverse… ¿Mito o realidad? para ser honesto, creo que hay de todo un poco.

Las primeras cañas “partidas”  de 2 o más piezas usaban unos casquillos metálicos (de ahí el nombre de ferrula) para unir sus partes y la misma incompatibilidad del metal con el material de la caña hacía casi nula la transmisión de alguna sensación de movimiento o picada sutil del pez (lo que llaman la sensibilidad) y ello se expuso siempre como una de las desventajas de las cañas de más de 1 pieza.

Para el pescador de orilla creo que no son necesarios tantos requisitos para sentir cuando un buen jurel se encima sobre el señuelo o un robalo se da la vuelta con el popper en la boca para comenzar sus saltos, o sus típicas corridas. Tampoco las uniones de hoy en día son de metal y el material de las cañas -incluso las que no son de primera línea- sigue mejorando por días.

Es cierto que en el área donde se empatan estas partes se crea un punto  más rígido que el resto de la caña, los materiales actuales y el hecho de que se embone directamente con el blank, garantizan la sensibilidad necesaria para la pesca de esteros, playas, troleo y por supuesto en la pesca de surf, donde normalmente se usan cañas de entre 10 y 12 pies de largo y con señuelos tan lejos como sea posible. Hasta en la pesca de jigging, donde se tienen buenas peleas con animales de mayor tamaño, muchas marcas top ofrecen cañas de 2 piezas por lo que al parecer no hay mucho que temer, y con los adelantos de hoy: menos.

Lo que sí es  evidente es que este tipo de caña resulta más cómoda de transportar que las de 1 pza. sobre todo para los que tienen coche chico o no tienen, y ni se diga cuando se viaja en avión. Sus cuidados son como los de cualquier caña, sumando solo el mantener limpias las partes que se unen. Para unirlas debemos hacerlo con un pequeño giro firme y no en línea recta, teniendo en cuenta la alineación de las guías. Un viejo tip que sigo usando es con los dedos pulgar y el índice, extraer la grasa que producimos de forma natural alrededor de las ventanas de la nariz ¡sí, de nuestra propia nariz! y untarla en la parte de la caña que se va a introducir; con esta solución, literalmente a la mano, veremos que al término de la jornada se puedan separar de manera fácil para limpiarlas antes de guardarlas.

El reel seat o asiento del carrete es quien mantiene el reel por sus “patas” unido a la vara. Muchos afirman que si no es de buena calidad -como los Fuji por ejemplo, durante el casteo tienden a aflojarse. Mi experiencia me ha dicho que si al montarse en la caña no se hace enroscando con firmeza las partes que lo sostienen, lo mismo se puede mantener firme  que aflojarse siendo el asiento de mala o de buena calidad y les aseguro que ambas cosas me han sucedido. Podemos ver como en las cañas de troleo, que por lo general son cortas y muy robustas, los reel seat son mayormente de metal. Estos traen una doble anilla para asegurar que el reel no se mueva de su posición durante las batallas, que como sabemos pueden durar hasta  horas con animales de mucha fuerza, al igual que pueden usarse unas abrazaderas que anclan el carrete muy firme por la parte inferior a la caña.

Del mango de la caña hay poco que hablar, pues amén de que a cada cual le acomode más de una forma y un largo determinado, igual será la preferencia por el corcho o el foam según el gusto del pescador. Sabemos que el corcho no absorbe agua y le resta peso a la vara, sin embargo, conozco a quien le gusta más el foam (espuma de neopreno comprimida) por ser más resistente al maltrato y poder sostenerse con firmeza aún estando mojado. Los pescadores de agua dulce y los que practican la pesca con carnada, prefieren tener una parte del blank expuesto para estar al tanto de cualquier movimiento de la línea pero, insisto, ello tiene mucho que ver con los requerimientos, el gusto personal y la modalidad que acostumbran al pescar.

El cuidado de las cañas definitivamente es una cuestión muy personal. Son herramientas que pueden durar muchos años y darnos muy bueneas satisfacciones con el mantenimiento adecuado como lavarlas a cada regreso (sobre todo las anillas, donde la sal puede acumularse y producir óxido muy rápido). Debemos tener en cuenta no golpear las guías que pueden quebrarse con facilidad y no guardarlas apoyadas para evitar que se arqueen con el tiempo. Si son de 2 piezas o más, deben guardarse sin montar y si ello fuera necesario, no las embonen hasta el final, solo introduzcan una parte en la otra sin presión, solo para que se mantengan unidas.

Hay quien es muy celoso con el equipo, lo lava y lo mantiene siempre en óptimas condiciones. Otros sin embargo los “almacenan” en las cajuelas de los autos expuestos al calor y los golpes hasta que los vuelven a usar y creo que lo importante es que cada cual actúe de la manera que se sienta bien y que por supuesto, tendrá que ver con lo que signifique la actividad para el pescador. Como la computadora al periodista, las cámaras al fotógrafo o las herramientas para un mecánico, porque a fin de cuentas de ello se trata.  

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